La historia del Oktoberfest de Múnich se remonta al 12 de octubre de 1810, cuando el príncipe Ludwig de Baviera, hijo del rey Maximilian I, contrae matrimonio con la princesa Teresa di Sajonia-Hildburghausen.
Apodada como la «Capital Mundial de la Cerveza», no es de extrañar que todos aquellos turistas que visitan cada año esta ciudad alemana lo hagan en parte para disfrutar de muchos litros de sus afamadas cervezas.
Oktoberfest, Múnich y cerveza Paulaner son las cuatro palabras que cada año vuelven a reunirse para dar forma a una de las mayores fiestas populares del mundo, la Oktoberfest de Munich.
Siete millones de litros de cerveza, seis millones de personas, 200 años de historia, 800 millones de euros en ganancias, 120.000 salchichas, son sólo algunas de las cifras del festival de cerveza Oktoberfest de Munich.
Curt Prank fue un ambicioso empresario cervecero que desembarcó en Múnich desde Berlín para instalar una carpa para 6.000 personas y vender su producto en el Oktoberfest, por las buenas o por las malas.
La cervecería Hofbräuhaus es una de las más famosa de Múnich, con un origen que se remonta hasta el año 1589, cuando era la cervecería a que abastecía a la familia a la familia real alemana.