La cerveza gourmet se ha convertido poco a poco en un ingrediente cada vez más utilizado para la elaboración de salsas y guisos, en el desarrollo de nuevas recetas y en un estilo de cocina que ha ido adquiriendo identidad propia.

Cocina con cerveza
Cocina con cerveza

En general, la cerveza es una bebida fermentada natural elaborada principalmente con malta, agua, lúpulo y levadura, un producto de relativamente baja graduación alcohólica, un moderado contenido de calorías y una rica presencia de vitaminas, proteínas e hidratos de carbono.

Al mismo tiempo, la cerveza logra desarrollar una serie de cualidades beneficiosas para la salud asociadas principalmente a la presencia de compuestos antioxidantes, que al igual que con el consumo de vino, ayudan a disminuir el envejecimiento celular previniendo la aparición de enfermedades degenerativas.

¿Qué sucede con el alcohol?

La cerveza por lo general es una bebida con bajos niveles de alcohol, por lo que su uso en la preparación de comidas no debería ser preocupante para el consumo de cualquier persona que no posea alguna patologías específica, como alergias por ejemplo, siempre en un contexto de uso moderado y complementario

Lo que tenemos que tener en cuenta, que la evaporación del alcohol de la cerveza al cocinar dependerá principalmente de la temperatura y el tiempo de cocción, pero en general si se trata de una cocción lenta a baja temperatura éste se reducirá prácticamente en su totalidad.

¿Qué podemos cocinar con cerveza?

Podríamos decir que no existen límites al uso de la cerveza para cocinar, con preparaciones que van desde marinados de carne y salsas que podrías utilizar incluso para acompañar algún postre.

1. Guisos

Puedes utilizar cerveza en guisos de carne, pescado y/o vegetales en donde podrás elegir la variedad que mejor se acomode a la preparación que tengas en mente, ya sean sabores tostados, amargos o incluso ligeramente agridulces.

2. Frituras

Los asiáticos lo han demostrado y es que el utilizar cerveza fría y carbonatada para preparar tempura le añadirá una suave crocancia, un interior esponjoso y dependiendo del tipo de cerveza utilizado, una particular apariencia visual.

Salsas y reducciones de cerveza
Salsas y reducciones de cerveza

3. Marinados

Una de las preparaciones que mejor resultados obtiene es el uso de la cerveza en marinados de carne, imprimiéndole una suave y una agradable textura, acompañada de un muy buen sabor en boca.

Además, se ha demostrado que el uso de cerveza en preparaciones de carnes asadas o a temperaturas muy altas, disminuye considerablemente la presencia de algunos compuestos potencialmente cancerígenos que se derivan de la reacción de Maillard.

4. Salsas

Incorporar cerveza en la preparación de salsas suele otorgar un delicioso sabor complementario añadido así como una especial cremosidad que podrás experimentar principalmente a partir del uso de cervezas negras.

Tipos de cerveza para cocinar

1. Cervezas tipo Ale

Las cervezas tipo Ale son una de las tres grandes familias existentes y se caracterizan por utilizar levaduras conocidas como de fermentación alta (15-23°C).

Dentro de ésta categoría podemos encontrar por ejemplo cervezas de estilo Brown Ale, Porter, Stout, IPA y cervezas Trapenses.

Tipos de cerveza
Tipos de cerveza

2. Cervezas tipo Lager

Las cervezas tipo Lager son aquellas que utilizan levaduras conocidas como de fermentación baja (7-12°C) y dentro de ésta categoría podemos encontrar por ejemplo cervezas de estilo Pilsner, Pale Lager y toda la familia de cervezas Bock alemanas.

3. Cervezas tipo Sour

Las cervezas tipo Sour son aquellas que utilizan levaduras silvestres del ambiente en lugar de levaduras Ale o Lager de cepas específicas, siendo las más reconocidas entre ellas las cervezas de fermentación espontánea que se elaboran en Bélgica, como Lambic y Gueuze.

Ejemplos de recetas con cerveza

A continuación compartimos algunas sencillas pero deliciosas recetas para comenzar a utilizar en la cocina, con amplias variedades siempre disponibles en tiendas de cerveza online.

1. Filete marinado en cerveza negra

Filete marinado en cerveza negra

Ingredientes

  • 330 ml de cerveza Porter o Stout
  • 1 kg de filete de flanco
  • 60 ml de salsa de soja
  • 3 dientes de ajo picados
  • 1 cucharada de azúcar morena
  • 1 cucharadita de pimiento en polvo
  • 1 cucharadita de cebolla en polvo
  • Sal kosher
  • Pimienta negra

Preparación

  1. En una fuente de cocina amplia añadir la cerveza e incorporar la salsa de soja, los ajos, el azúcar el pimiento y la cebolla, salpimentar a gusto y revolver hasta disolver e integrar todo.
  2. Sumergir el filete en la marinada, humectándolo de forma homogénea con una cuchara, cubrir con papel film y reposar en el refrigerador por al menos una hora, aunque idealmente toda la noche.
  3. Retirar el filete de la marinada, absorber el exceso de humedad y espolvorear con sal kosher a gusto.
  4. Asar el filete en la parrilla a fuego medio, unos 3 minutos por lado, retirar del fuego y reposar en una tabla de madera por unos 5 minutos, luego cortar y servir inmediatamente.

2. Sopa de cerveza, queso y pimientos

Sopa de cerveza, queso y pimientos

Ingredientes

  • 330 ml de cerveza Brown Ale
  • 250 g de queso cheddar rallado
  • 2 tazas de caldo de pollo
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • 1 1⁄2 taza de crema espesa
  • 1 1⁄2 cucharadas de mostaza de Dijon
  • 1 cucharada de ajo fresco picado
  • 3⁄4 taza de pimientos escurridos y picados
  • 1⁄2 taza de cebolla finamente picada
  • 1⁄2 cucharadita de pimiento rojo
  • ¼ taza de harina
  • Salsa picante (opcional)
  • Sal
  • Pimienta

Preparación

  1. En una olla grande a fuego medio derretir la mantequilla, agregar la cebolla picada y sofreír hasta que esté transparente, unos 3 a 5 minutos.
  2. Incorporar el ajo y cocinar por un minuto más, añadir el harina y revolver constantemente por unos 2 a 3 minutos hasta integrar y obtener un color ligeramente tostado.
  3. Añadir el caldo y la crema lentamente sin dejar de revolver, verter cuidadosamente la cerveza, añadir la mostaza, opcionalmente unas dos o 3 pizcas de salsa picante y el pimiento rojo, subir el fuego y llevar a hervor revolviendo de vez en cuando.
  4. Bajar el fuego y mantener la cocción a fuego lento por unos 12 a 15 minutos, revolviendo de vez en cuando hasta que comience a espesar ligeramente.
  5. Retirar del fuego y añadir el queso poco a poco revolviendo hasta obtener una textura aterciopelada, espesa y cremosa, incorporar los pimientos picados y sazonar con sal y pimienta al gusto.
  6. Servir la sopa en tazones individuales y opcionalmente decorar con unos mini pretzels sobre cada porción.

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